“Ya no se sienten solos, están acompañados por sus pares”, así refiere la nueva coordinadora, Marta Barahona, al ambiente que se vive desde hace una semana en el Centro Día para Personas Mayores, Padre Damián de Molokai.
El lunes pasado retomaron las actividades 12 beneficiarios y beneficiarias con mucha alegría y esperanza por el reencuentro después de dos años de pandemia. Entre las 9.30 y las 15 horas se les entrega servicio de desayuno, almuerzo y colación. Son atendidos por voluntarias de la Fundación Amanoz y otras independientes, el martes, quienes abren diálogos y realizan oraciones.
Barahona, agrega, que reciben muy bien sus alimentos, hay buena convivencia “y estamos convocando a organizaciones como la Fundación Juanita Díaz, que antes de la pandemia venían a visitarnos, que retomen esa actividad para dar apoyo a las personas mayores que han elegido nuestro centro para pasar sus horas”.