Las casas Tío Franz y María Paz de la residencia para menores “Nuestra Señora de la Paz” que acoge a niñas y adolescentes vulneradas y en riesgo social, están en pleno proceso de reparación y pintura. Hace unos años habían sido restauradas por colaboradores, sin embargo, el deterioro ya era evidente. El paso del tiempo y la rotación de menores pasaron la cuenta.

“Queremos que las chicas tengan espacios lindos y limpios. Las paredes estaban muy sucias y las puertas de los clóset destruidas”, sostuvo la trabajadora social y directora del centro Valentina Pérez. Agregó, que obviamente ellas tendrán que limpiar las puertas de los clóset de los dormitorios que les corresponden. “Somos una familia con las mismas responsabilidades que cualquiera, sólo que tenemos 30 hijas”, dijo.

A estos trabajos debieran sumarse otros que están siendo presentados al SENAME como “Proyectos de Emergencia” con lo que se pretende otorgar mejor calidad de vida a las menores.